martes, 29 de octubre de 2013

POETA ALONSO MEJIA SANCHEZ (NICARAGUA - COSTA RICA)

ALONSO MEJIA SANCHEZ






















EL VINO VINO Y ME INVITÓ….
A la memoria de José Coronel Urtecho
El vino, espesa sangre tinta-pluma;
vino hoy y me invitó a escribir.
Entonces pienso en Julius Fiuzik, el periodista checo colgado en Praga por los nazis.
Recuerdo a Gustina, su compañera  creo que también colgada,
y el poema que le dedicó Neruda viendo los muros fríos de la ciudad lejana.
Lo recuerdo ahora que también recuerdo que una vez leí su Reportaje al pié de la Horca,
escrito en papel de cigarrillos (¡y yo tengo internet!)
mientras yo estaba preso en una cárcel de Masaya
 –tres días por un delito que no cometí, como dicen por ahí-
y fumé cigarrillos y compartí el pan de mi madre con vándalos, violadores y asesinos.
Hermanos de cárcel y de sombras…
Lo dijo Bienvenido Granda: hay que estar un día preso para saber lo que es la libertad.
(El vino me lo está hurtando una mosca volandera)
Pienso en Manolo Cuadra, el poeta nica
que un día de mediados del siglo pasado dijo:
“La pasión por las mujeres bonitas me llevó a San José de Costa Rica”.
Ese poeta fue peón bananero y amigo de Francisco Amighetti
y apuntó sus dardos periodísticos a la United Fruit Company
-de él nos habla Emilio Quintana en su libro “Bananos”: “el poeta más humano que pasó rozando mi blusa de peón y escritor”, dijo-
Las mismas bananeras donde ahora despiden a mis hermanos inmigrantes nicas y panameños indígenas por hacer sus huelgas.
Y esa frase de Manolo le gustaba a Julio Acuña,
entrañable poeta que ahora duerme en aquellas colinas verdes y perdidas en Grifos de Puriscal.
La celebraba riendo y abrazándome,
tanto que me dedicó un poema con una dedicatoria que dice:
“Para Alonso mi hermano, por compartir el gusto por las mujeres pequeñas”.
Pues entonces yo amaba a una hembra llegada a San José desde esa tierra de la alegría que es Colombia.
Y mejor guardo este apunte/poema para mañana y me apuro el último sorbo de mi soberbio y humilde vino.
Vino y me sacó esta conversación como quien dice: a lo que vino vino.

Encinales de Higuito, Desamparados, Costa Rica.

1 comentario:

  1. Hola Alonso. Tantos años.
    Necesito contactarme con su persona. direccion@prensamerica.com
    Abrazo desde Chile

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